¿Eres de las que piensan
que llevar gafas está reñido con lucir perfecta el día de tu boda? Volveré a
preguntártelo al final del post, apuesto que habrás cambiado de idea...
Una novia debe reflejar
su personalidad. Si usas gafas fijas y son tu seña de identidad, ¿por
qué no llevarlas también el día de tu boda? Tus amigos o familiares puede que
no estén habituados a verte sin ellas y les resulte un tanto extraño. Al igual
que pasa con el maquillaje (novias que apenas se maquillan y van pintadas
como puertas el día de su boda) pasa con las
gafas. <<No hay que disfrazarse de novia, hay que vestirse de novia>>.
Si aún así
sólo de pensarlo se te ponen los pelos de punta, “ojo“ con las lentillas si no
estás acostumbrada. Prueba a ponértelas unas semanas antes de la boda, si tu
ojo las rechaza y acaban hinchándose, estarás a tiempo de ponerle remedio.
Si te preocupa que las
gafas no encajen con tu look, ¡Toma nota!
- Si llevas gafas de colores, intenta que tu ramo coincida con los tonos de la montura, estarás en sintonía.
- Date algunos toques de polvos compactos en la zona de la nariz, así evitarás que las gafas resbalen y te molesten.
- Usa preferiblemente cristales antireflectantes, se te verán los ojos en las fotos.
- Aunque seguro que te pondrás en manos de un maquillador estupendo, si eres miope, haz que tus ojos parezcan más grandes aplicando el lápiz en la parte exterior del ojo. Haz todo lo contrario si sufres de hipermetropía.
¿Sigues pensado en renunciar a tus gafas?
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